Así estimó un especialista inglés David Miles quien calculó que, para inicios de 2021, el comercio mundial puede estar funcionando casi a pleno aunque con economías más centradas en el mercado doméstico
David Miles es un analista económico de las pandemias: “Aunque algunos busquen analogías con las guerras mundiales, la crisis del Coronavirus no es similar a la de una contienda mundial”, señaló.
Y ahí, al contestar a la periodista argentina María Laura Avignolo, lanzó su frase integrada: “Si se encuentra la vacuna (contra el Covid) la recuperación será rápida: el consumo repuntará de manera aguda y el PBI se recuperará rápido. El comercio mundial volverá a ponerse en marcha.
Este optimismo parece ir en contra del informe del Banco Mundial.
Para la entidad de crédito, debido a las graves distorsiones a la oferta y la demanda internas, el comercio y las finanzas, la actividad económica de las economías avanzadas se contraerá un 7% en 2020, mientras se espera que en el caso de los mercados emergentes y las economías en desarrollo (MEED) la contracción llegue al 2,5 % este año, su primera contracción como grupo en al menos 60 años. Y la caída prevista de los ingresos per cápita que llega al 3,6% llevará a la pobreza extrema a millones de personas este año.
David Miles del Imperial College Business School, en Londres y un especialista en política monetaria, en el Comité del Banco de Inglaterra no es ingenuo.
Sabe que habrá problemas, aún con la vacuna ya en marcha.
Tal como lo sostuvo el BM, “los efectos de la pandemia son más profundos en países con más contagiados y también en los que dependen en gran medida del comercio internacional, el turismo, las exportaciones de productos básicos y el financiamiento externo.
¿Qué ha contestado a este planteo, Miles?
“A lo mejor, desarrollamos una vacuna bastante rápido y, tal vez, a principios del año que viene, haya muy pocas restricciones en ninguna parte del mundo a las actividades económicas (…) No creo que volvamos completamente a donde estábamos, porque la gente que maneja empresas va a estar mucho más consciente de la posibilidad de restricciones repentinas en movimientos. Entonces, tal vez, las empresas consideren las cadenas de abastecimiento orientadas al mercado interno”.
Luego agregó, que a diferencia de las conflagraciones mundiales que duraron muchos años, aquí el combate contra el Coronavirus puede ser más corto. Con lo que también, se acortará el período de recuperación.
Como para poner alguna advertencia a sus optimistas pronósticos, señaló: “Si se consigue una vacuna pronto, la confianza de las empresas y los consumidores retornará rápido. Pero si estamos en una situación la que hay que volver a imponer restricciones sin vacunas, en la que parece no haber un final a la vista para esta disrupción, entonces la historia será muy distinta, mucho más negra”.