El caso de la supuesta prohibición de la yerba mate permite algunas reflexiones
¿Cuántos grupos de WhatsApp se hicieron eco de la noticia del “Boletín Oficial” donde se señalaba la prohibición en la venta de yerba mate? Muchos, ¿verdad?
Ya con la gimnasia de tantos días de encierro y de “ver” cuándo la mano es sospechosa, muchos simplemente dijeron (en los mismos grupos): “Nahhhh. Eso es mentira. Es un invento…”
Y sí. Tenían razón.
Cuando se le consultaba al famoso “conector” o “estúpido-conector” que se encargó (rápidamente, sin ningún tipo de chequeo) de compartir la noticia, era fácil imaginar a la persona de marras alzando los hombros en forma indolente y decir: “Ah… yo lo compartí por las dudas…”
¿¡¡¡Por las dudas!!!!? Quéeeeee. El grito debería ser unánime y quien realizara este tipo de acciones debería ser castigado con una exclusión del grupo o algún tipo de castigo… ¿o no? Por las dudas, digo.
Mario Pernigotti