Fue en Viedma, Río Negro. Un hombre fuera de control comenzó a efectuar disparos en el lugar, luego de que su auto no pasara la revisión técnica
Un hombre fuera de control generó un susto mayor cuando disparó contra la planta de Revisión Técnica Obligatoria (RTO), ubicada en la calle Haití 363 de la capital rionegrina. Los empleados del lugar vivieron momentos de nerviosismo y angustia.
Este hecho ocurrió en medio de un robo de una camioneta que se había producido en pleno centro de la capital rionegrina. Mientras era intensamente buscado ese vehículo, la Policía salió en otro operativo para dar con un hombre de 70 años que disparó dentro de la planta de RTO, informaron los medios rionegrinos.
Esa persona, minutos antes, en un acto de furia y descontrol comenzó a disparar en el local luego de que su vehículo no logró pasar por la revisión. Según información policial, el hombre disparó dentro del local y produjo daños materiales, incluso contra las computadoras. Lo notable es el arma que portaba. Entró y sacó de su vehículo una escopeta recortada (tipo pistolón) y comenzó a disparar dentro del edificio. “El ataque produjo daños sobre mobiliario y equipos informáticos”, señaló la Policía local.
Esa acción puso en riesgo la vida de los empleados que se vieron sorprendidos y con mucho temor por la furia del hombre que terminó huyendo del lugar.
Minutos más tarde, efectivos policiales ubicaron al hombre a cuatro cuadras de la planta, en calle Honduras y bulevar Ayacucho, donde por pedido de la Fiscalía fue detenido.
Luego de efectuar los disparos, el sujeto se dio a la fuga. El personal policial de la comisaría 34 accionó rápidamente y luego de una breve persecución pudo detenerlo. El Fiscal en turno dispuso la requisa del rodado donde se procedió al secuestro de un arma de fuego tipo pistolón. Asimismo, se labraron las actuaciones judiciales por el delito de “Abuso de arma y daños”, y se ordenó que el hombre quede aprehendido a disposición de la Justicia. Pero además tiene antecedentes psiquiátricos.
Como en la película Relatos salvajes, un mal día puede derivar en explosiones.
Lo notable de la crónica es que en ningún lado se consignó el modelo y la antigüedad del vehículo en cuestión, ni cuál era el problema que tenía para ser rechazada su verificación.