Luana Ledesma y Agustina Weber emprendieron en pandemia. Dejaron el Derecho y la abogacía por un rato de lado y se metieron a elaborar pastas especiales con colorantes de las propias verduras que compraban en las ferias francas.
Tal fue el suceso, que habiendo pedido ayuda, el Estado las asistió con elementos necesarios para los procesos de elaboración.
Ahora, tanto el intendente Ing. Leonardo Stelatto como el presidente del Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial, (IFAI) Cr. Marcelo Rodríguez participaron en la inauguración del local “Código Pastas”.
Un emprendimiento dedicado a la elaboración de pastas de excelente calidad (sorrentinos, ravioles, fideos cinta y espaguetis), una iniciativa que es llevada adelante, desde septiembre de 2020, por dos jóvenes emprendedoras misioneras, Luana Ledesma y Agustina Weber.
Fue durante una reunión en las instalaciones del local, ubicado por la calle Líbano casi Mitre.
En la oportunidad, las autoridades observaron el funcionamiento y producción de la fábrica de pastas, obra que fue puesta en marcha con los equipamientos otorgados a través del IFAI y que contó con el apoyo de la Municipalidad mediante las habilitaciones correspondientes.
En este sentido, Luana Ledesma declaró que están muy contentas con lo que lograron en este tiempo.
“Iniciamos con esto para salir adelante y tener nuestros propios ingresos haciendo lo que nos gusta que es cocinar y fue creciendo tanto que llegamos a diferentes lugares, como locales muy reconocidos de la ciudad”, dijo no sin orgullo.
Y agregó cómo fue que llegaron a la decisión de llegar a la apertura un local. “Tanto los equipamientos, la habilitación y tener todo en orden hizo que podamos abrir al público, algo que era nuestro sueño y por el que venimos trabajando hace mucho tiempo”.
Por su parte, el presidente del IFAI destacó este tipo de accionar de su organismo. “Es una gran satisfacción asistir a la inauguración de un local donde sabemos que hemos intervenido, dando las herramientas necesarias para demostrar que con esmero y ganas de trabajar todo es posible”.
En marzo pasado, Luana y Agustina fueron protagonistas de una nota de Periodismo Misionero. Y allí anunciaban su intención de tener un local propio.
Hoy, el sueño se hizo realidad.
