El buzo dijo que lo hizo después que la ballena cortara las mangueras de oxígeno y que está “arrepentido”. La Municipalidad lo denunció.
Estaban mariscando. Es una playa llamada La conchilla (está sembrada de ellas) en el Puerto San Antonio y el lugar no se halla muy lejos a la mucho más famosa península de Puerto Pirámides donde van los turistas y visitantes for export. Esta zona perteneciente a Río Negro posee cierto encanto silvestre que la hace única para muchos que aman los circuitos menos transitados del turismo de avistaje de ballenas.
Y Toti se lanzó a bucear pero en un momento, las ballenas comenzaron a nadar sobre ellos. Toti estaba con un compañero de inmersión.
En un momento, uno de estos mamíferos cortó los tubos de oxígeno y ambos tuvieron que venirse a la superficie en forma urgente.
Y allí ocurrió todo. Claro, había en la embarcación otro compañero que fue registrando las acciones. Toti salió a superficie y vio a la hermosa ballena franca con ánimos juguetones (o eso él pensó, al menos) y se lanzó hacia ella.
En un momento se trepó sobre su inmenso lomo.
Y así quedó registrado.
Estos días Toti tuvo la malhadada idea de publicar el video quizá en la convicción de que ya había prescripto la falta. ¡Para qué!
No prescribió nada.
Tomás ‘Toti’ Sarmiento, el buzo marisquero de 26 años, tras subir a sus redes un video en el que se lo ve, literalmente, pasando por encima de una ballena franca, pasó a ser el “malo de la película”.
La ballena se había acercado de manera amistosa a la embarcación, debido al comportamiento curioso que tienen estos animales.
El accionar del hombre fue repudiado por los vecinos de la localidad y motivó a la municipalidad a realizar una denuncia contra él, debido a que, acosando al cetáceo, puso en riesgo su vida e incumplió las leyes de protección que existen sobre la especie.
El video en cuestión es el siguiente
Además, contó que, antes de esa filmación, la ballena los sorprendió y se acercó a la lancha de pesca artesanal que los esperaba, mientras él y sus dos compañeros estaban a 7 metros de profundidad.
“Al moverse nos cortó dos de las mangueras de oxígeno, y arrastró el ancla de la lancha” dijo.
Tras el momento de tensión, que los obligó a emerger debido a la falta de oxígeno, se encontraron con el animal, a metros de la embarcación.
“Había dos (ballenas) más, nadando cerca. Ahí fue cuando hice eso de pasarle por arriba. Había pasado el susto del corte de mangueras y ella estaba ahí nomás. Fue algo tonto, que no volvería hacer” dijo.
Ahora, el área de medio ambiente provincial, que fue informada por la municipalidad, también deberá denunciar lo ocurrido.
“Puso en riesgo su vida y a todo un destino que está trabajando de manera consciente y sostenida en los paseos de avistaje. Porque ésta de ninguna manera es la forma en la que se debe actuar con una ballena. Es un recurso valiosísimo y todos debemos estar compenetrados en cuidarlas” aseguró Oscar Echeverría, el titular de ambiente a nivel local.
Que, además, sostuvo que, para el municipio, el video “es actual”. Aunque relativizó ese dato. “Haya ocurrido ayer o hace tres años, ese acoso es un delito” subrayó.
Lo que pasó, además, visibilizó un tema que tendrá que tener un abordaje urgente.
Ocurre que, en la temporada, que se extiende desde fines de julio hasta finales de octubre, las ballenas que ingresan al Golfo San Matías cada vez son más. Y deben estar bien claros los protocolos que hay que tener en cuenta si un ejemplar se acerca a cualquiera que esté haciendo una actividad náutica.
“En el mar todos debemos coexistir, sin prohibiciones. Pero para eso hay que ser muy respetuosos en la forma de conducirnos. Y es imprescindible que Prefectura actúe como el órgano de contralor que es, para evitar que alguien haga algo incorrecto” manifestó la bióloga Magdalena Arias.
“Las (ballenas) francas no son agresivas, y son naturalmente curiosas. Pero una cosa es que se acerquen ellas, y otra muy distinta cuando el acercamiento es al revés. Porque son animales muy grandes. Y un coletazo, como mínimo, puede desmayarte y quebrarte 5 costillas. Por eso hay que saber cómo actuar cuándo son ellas las que se nos aparecen. Y evitar perseguirlas cuándo, sin buscar contacto, están nadando cerca nuestro” explicó.
Arias enumeró la forma correcta de conducirse. “Siempre hay que permanecer a un mínimo de 200 metros de un animal. Y a mayor distancia si está haciendo saltos o dando golpes de cola. Y, si es la ballena la que se nos acerca, esperar quietos y dejarse avistar hasta que se aleje. Y no intentar sumergirse junto a ellas. En el caso de estar en una embarcación con motor, hay que aguardar sin apagarlo” aconsejó la bióloga.
240 ballenas en el Golfo
El incremento de ballenas francas en el Golfo San Matías es notable. Algo que habla de la recuperación de la especie, que está re colonizando sitios que antes formaron parte de su hábitat. Por eso es tan importante que queden claras las pautas para convivir con ellas cuándo se registra la temporada, que suele extenderse desde fines de julio hasta finales de octubre.
“El fin de semana censamos 240 ejemplares en el Golfo. Ese número supera al máximo que habíamos relevado años atrás, que era de 180 individuos. Y habla de la enorme cantidad de ingresos, porque hace un mes avistamos 120 ballenas, y, ahora, ya tenemos el doble” informó la bióloga Magdalena Arias.
Debido a esto, es importante concientizar a vecinos y turistas sobre la importancia de respetar las pautas a la hora de convivir en el mar con posibles avistajes.
“Este fin de semana en Las Grutas hubo muchas ballenas cerca de la costa, y, en un momento, se veía a algunos ejemplares rodeados, como mínimo, por diez kayaks. Y la idea es no perturbarlas, porque nadie quiere que se vayan, al contrario, desde hace años se trabaja a conciencia en pautas de manejo para que se puedan llevar adelante los paseos de avistaje embarcado” manifestó Oscar Echeverría, el titular de la cartera de ambiente municipal.
“Por eso hay que tratar de evitar comportamientos que atentan contra ellas, que son un recurso valiosísimo”, cerró el funcionario.
