La cultura maker llegó con el siglo XXI y Sonia Rojas Decut deja algunas directivas sobre la misma, así como sobre las habilidades blandas y duras. Y no soslayó tratar la cuestión de las sociedades del conocimiento y de la innovación. Imperdible
Especial para PM Sonia Rojas Decut
Qué es la cultura maker
La cultura maker tiene que ver con el ‘’aprender haciendo’’; la educación maker permite que los estudiantes desarrollen habilidades, aptitudes y formas de pensar e interactuar que los conectarán con los desafíos de la educación y de los trabajos del futuro, sobre todo por su apuesta a un enfoque práctico sobre el aprendizaje que genera oportunidades para aquel que pretenda desarrollar una confianza creativa, a la vez que incrementa el interés y la experiencia en ciencias, tecnología, ingeniería, arte, diseño y matemáticas (STEAM).
La Cultura Maker comprende actividades en las que la imaginación, la curiosidad y la creatividad se complementan a través del desarrollo del pensamiento computacional, la programación, la robótica, el diseño y uso de impresoras 3D, la gamificación, entre otras, en la misma se potencia el trabajo colaborativo y creativo para dar soluciones a problemas emergentes o para gestionar proyectos en equipos, además de aplicar ideas para el uso inteligente y creación de tecnologías.
Qué son las habilidades blandas
-Las habilidades blandas tienen relación directa con la capacidad de relacionarse socialmente, de trabajar en equipo, desarrollar empatía, capacidad para adaptarse a los cambios, ética de trabajo, comunicación y proactividad, entre otras.
Las habilidades blandas también llamadas soft skills se complementan con las competencias técnicas o de especificidad para un área determinada. El uso de metodologías activas del aprendizaje, de aprendizaje basado en proyectos o en servicios, en el enfoque de las STEAM, la enseñanza de la programación y la robótica, generan espacios de aprendizajes propicios para el desarrollo de este tipo de habilidades que forman parte de las tan demandadas habilidades del siglo XXI, en primer lugar, porque fomentan la resolución de problemas en equipo, el desarrollo del pensamiento crítico y de la creatividad.
Qué son la sociedad de la innovación y la sociedad del conocimiento
La sociedad del conocimiento es el conjunto de disciplinas que incluye a la ciencia, biotecnología, la economía, la técnica, entre otras.
Con la sociedad del conocimiento se generan nuevos cambios y desarrollos socioculturales que impactan en la manera en que nos comportamos, nos comunicamos, trabajamos y en el cómo educamos.
Sobre todo, porque estos nuevos desafíos movilizan el quehacer de las personas y demanda que la educación se adapte constantemente ante estos nuevos retos que están apalancados por las tecnologías de la información y la comunicación, la informática y en especial el internet, que son universos propios de la sociedad del conocimiento, que además amplían nuestro marco de interacción humana ya que estamos ante una aldea global que trae disrupciones en los procesos educativos, económicos, científicos y tecnológicos que dan lugar a la innovación. Esta sociedad del conocimiento es la que empuja a que se generen las innovaciones necesarias para romper la lógica tradicional de un conocimiento que era lineal a un conocimiento que pasa a ser complejo e integral. Para dar respuestas a lo que la sociedad del conocimiento nos plantea hoy a nivel global.
Necesitamos soluciones de interdisciplinariedad, de aprendizajes humanos basados en proyectos inter y multidisciplinarios y de por sí esto es una gran innovación en la manera en que repensamos criteriosamente la educación. Esta sociedad pone en valor el conocimiento para impulsar la innovación, el emprendedurismo y el desarrollo de una economía sostenible y, es el conocimiento el que determina su competitividad.
