Nanci Ehman, una joven investigadora misionera, fue distinguida en Estados Unidos por una investigación con desechos de madera. Pero son Ciencias Exactas de la Unam y el Programa de Celulosa del Instituto de Materiales de Misiones con Cristina Area los que reciben el reconocimiento por su trabajo de años
En inglés (lenguaje científico por excelencia) suena así: “Towards biodegradable barrier packaging: Production of films for single-use primary food liquid packaging”. Traducido viene a ser algo así como. «Hacia un empaque con barrera biodegradable: producción de películas para empaques primarios de alimentos líquidos de un solo uso»
Nanci Ehman vino de Puerto Rico a Posadas y realizó la carrera de Ingeniería Química en la Facultad de Ciencias Exactas, Químicas y Naturales (FCEQyN) de la UNaM. Hasta ahí, nada excepcional. Lo extraordinario ocurrió después, se puede parafrasear al novelista argentino Eduardo Sacheri. Terminada su carrera de grado comenzó su doctorado en Ciencias Aplicadas en el Instituto de Materiales de Misiones. Y ahí empezó a tomar otro color la cuestión. Ella trabajó con María Cristina Area.
Esta es la región más grande y más fuerte del país en el área forestoindustrial. Y Area (se acentúa en la ‘e’) viene trabajando desde hace años en cuestiones sobre el papel y la celulosa.
Y a esas cuestiones se dedicó Ehman.
Por su lado, María Cristina Area es doctora en Ingeniería Papelera por la Universidad de Quebec, Canadá y se especializa en el desarrollo de biorrefinerías para la generación de productos y materiales a partir de biomasa. Durante los últimos años, se desempeñó como directora del IMAM y vicedirectora del CCT Nordeste (en la actualidad fue elegida con Directora del CCT). También ejerce como profesora titular en la FCEQyN, donde además dicta formaciones de posgrado.
La madera es la fuente de una cantidad innumerable de productos. Y hay mucho desecho para aprovechar proveniente de la transformación mecánica.
Hacer rendir hasta el último gramo de esta poderosa sustancia natural es el objetivo con el que trabajan investigadores del Conicet en Misiones, la provincia forestal argentina por excelencia, en la que unas 350 mil hectáreas están cultivadas con distintas especies leñosas.
Pioneros en el desarrollo de técnicas de biorrefinería, los miembros el Programa de Celulosa y Papel (PROCYP) del Instituto de Materiales de Misiones (IMAM, CONICET – UNaM), estudian desde la década del 90 distintos tipos de biomateriales que pueden producirse a partir de la madera.
Algunos de sus proyectos -por los que son reconocidos en distintos países del mundo- consisten en la obtención de bioplásticos para impresiones 3D, nanocelulosa para reforzar papeles de embalaje, vainillina para uso en repostería e hidrogeles para la industria cosmética
¿Cuál es la novedad?
En estos días, dice la crónica, “la investigadora del Conicet en el Instituto de Materiales de Misiones (IMAM – Conicet – Unam), Nanci Ehman, recibió el premio Early Career Investigator 2021 de la revista BioResources. La distinción fue otorgada por su trabajo referido al desarrollo de nuevas alternativas de packaging biodegradable.
(Eso de Early Career viene a ser como el investigador nuevo, el que está empezando y que presenta los resultados de sus trabajos). El principiante puede ser una acepción. Pero nada de novata: Nanci está trabajando duro desde hace tiempo y ha descubierto elementos más que interesantes que le permitieron presentar en su trabajo de tesis doctoral.
El premio reconoce la investigación novedosa, impactante y cautivadora de un investigador de carrera temprana en cualquier marco, experimental o teórico, relacionado con materiales lignocelulósicos, productos químicos y aplicaciones para nuevos usos y nuevas capacidades.
Los postulantes (profesionales tempranos prometedores) fueron votados por los 20 miembros del Consejo Editorial (internacional), resultando ganadora la Dra. Ehman.
El trabajo ganador se publicará gratuitamente en la revista BioResources.
“Este premio es un incentivo muy importante, no solo a nivel personal sino para todo el grupo de trabajo que integro en el IMAM, desde donde buscamos soluciones para desarrollar reemplazos que permitan disminuir el consumo de plásticos a nivel global”, señaló Nanci Ehman. La joven, que fue becaria doctoral y postdoctoral del CONICET y recientemente fue seleccionada para el ingreso a la Carrera del Investigador Científico (CIC), se está especializando en la obtención de materiales biodegradables que puedan ser utilizados como envoltorios de distintos alimentos, fabricados a partir de recursos lignocelulósicos.
BioResources es una revista científica de la Universidad del Estado de Carolina del Norte, en Estados Unidos, que especializa en la publicación de investigaciones referidas a la ingeniería de los materiales lignocelulósicos, productos químicos y sus aplicaciones. Cada año, el comité editorial selecciona los trabajos más destacados de investigadores jóvenes.
Convertir desechos en materias primas
Con procesos amigables con el ambiente, investigadores del Conicet en Misiones obtienen productos a partir de residuos agroindustriales y forestales, como el bagazo de la caña de azúcar o el aserrín de pinos y eucaliptos.
La línea de estudio que se desarrollo es Misiones es única en el mundo. Si bien existen otras investigaciones sobre pinos, las especies que se plantan en Argentina (Pinus elliottii y Pinus taeda), tienen características particulares distintas a las de otras coníferas del hemisferio norte. “Es una materia prima bastante difícil, lo que hace que no sea eficiente la aplicación de los procesos que se están usando en otros lugares del mundo. Eso nos obliga a utilizar otras tecnologías de tratamiento y hace que nuestro trabajo sea muy interesante para otros grupos de investigación”, comenta Area, al tiempo que destaca la importancia del trabajo en red con otros países, como Alemania, Finlandia, España, Portugal, Chile y Perú, entre otros.
Entra Nanci
Una de las propuestas más avanzadas del grupo consiste en la fabricación de un hidrogel de nanocelulosa que permitirá obtener mayor resistencia en papeles de embalaje, que es uno de los tipos de papel que más se produce internacionalmente. “Estamos probando distintos métodos para aplicar el hidrogel, en distintos momentos de la fabricación del papel, analizando en qué instancia se obtiene mayor resistencia”, explica Nanci Ehman, al realizar su tesis doctoral en el IMAM, quien destaca que, además de los ensayos de laboratorio, también realizarán pruebas directamente con fabricantes, a nivel industrial, lo que acelerará la aplicación directa de los resultados de estas investigaciones.
En definitiva, más allá del galardón otorgado a la joven misionera de Puerto Rico y que hoy vive en Posadas, el objetivo de los científicos es desarrollar productos completamente biodegradables, obtenidos a partir de recursos renovables que están disponibles y son abundantes en la región del nordeste argentino.
Una de las principales ventajas que presentan los bioproductos en cuanto a sustentabilidad es que pueden reemplazar a los derivados del petróleo que se emplean en la fabricación de plásticos y de productos cosméticos. “Los biomateriales son productos sólidos, como la nanocelulosa, la celulosa microfibrilada, las pulpas de disolución, que son pulpas de celulosa que se pueden disolver para fabricar viscosa, una fibra textil.
La madera, principalmente la de estas especies leñosas, son fuente de una variedad innumerable de productos”, explica María Cristina Area, investigadora independiente del CONICET y directora del PROCYP.
El uso de materias primas locales es una de las premisas del grupo de investigación. “En Misiones y Corrientes, una de las especies más plantadas es el pino y su aserrín es una materia muy abundante. Es un residuo que genera la industria forestal, que se podría aprovechar de manera integrada, con otras industrias”, resalta.
Al finalizar la nota, Area puso de relieve algo significativo para la vida de Nanci Ehman.
Y vale la pena destacarlo: “Un dato que no surgió en ningún lado y que estaría bueno resaltar es que Nanci ha realizado estadías de investigación en Noruega, Estados Unidos, Portugal, España y Perú”.
Bien por ella y por Cristina Area y su trabajo incansable en la región de los árboles y la industria forestal.
¡Qué orgullo! para Misiones
Total y absoluto, Lili!