El dueño de los alfajores Guaymallén (que no son mendocinos) se quejó en redes y tuvo protagonismo como es su costumbre. Es porque algunos usuarios y consumidores se quejaron de que el tamaño se había achicado y que traían menos dulce de leche.
El alfajor ese bocado dulce, ese par de galletitas horneadas y rellenas con dulce de leche y un baño de chocolate (o algo similar) es la golosina preferida del país. Es tal su popularidad que incluso este año tuvo su propio campeonato: a mediados de año se realizó una cata a ciegas en el marco del Primer Campeonato mundial del alfajor y en el que participaron 150 productores del país y el mundo con 350 muestras de alfajores.
Alguien muy relacionado con los alfajores es el dueño de la fábrica Guaymallén, que cuenta con más de 63 mil seguidores en Instagram. Hugo Basilotta ganó popularidad al publicar un video donde prueba varios alfajores argentinos y por motivar a los jóvenes a quedarse a producir en el país.
El mismo se encargó de mostrar cuáles son sus diez marcas preferidas.
En el puesto 2 puso al triple de Fantoche por sobre el Havanna.
En esta ocasión, el particular empresario publicó un video en el que responde a las quejas de algunos consumidores del popular alfajor.
“Hoy estoy muy enojado, nervioso”, comienza diciendo Hugo Basilotta, en su cuenta de Instagram @nhbasilotta. Y agrega: “Se quejan en Instagram, algunos finolis, que el alfajor es más chico, que tiene menos dulce de leche, que el baño no se qué… “
“Mire lo que es esto. ¡Esto es extraordinario! ¡Es la perfección hecha alfajor!”, exclama.
“38 gramos dice el papel. Venga”, dice Hugo, tras lo cual se acerca a una balanza de cocina y pesa al alfajor que tiene en su mano: “42 gramos”, cuenta. Y luego remarca: “¿Por 40 pesitos que quiere que le ponga, chocolate suizo y un pote de dulce de leche adentro?. Mire lo que es esto”.
Guaymallén: el número 1 en Argentina
Según el ranking de los 10 alfajores más vendidos en Argentina, que realiza cada año la Unión de Kiosqueros de la República Argentina (UKRA), Guaymallén lideró las ventas por dos años consecutivos.
El rannking se realizó en base a una encuesta de la que participaron 112.000 comercios de todo el país. Los resultados de la encuesta que da cuenta del top 10 de las marcas más elegidas por los argentinos arrojó un imbatible ganador: el alfajor Guaymallén.
“El alfajor de la familia” es el eslogan de la marca creada por Ulpiano Fernández en 1945. Se trata un alfajor que pasó a formar parte del podio histórico argentino junto a Jorgito y Fantoche, una terna que atraviesa todas las clases sociales y edades.
Jorgito, Capitán del Espacio y Águila en todas sus variedades son otros de los alfajores que integran el Top 5 argentino.
Según iProfesional, de Mar del Plata provienen los alfajores más difundidos, al menos en la región pampeana: los compuestos de dos galletas de masa quebrada rellenas de generoso dulce de leche y bañadas en chocolate, el alfajor de cada día.
Los pioneros de la patria, los santafesinos, se componen de capas de masa fina y crocante –en general tres– intercaladas de dulce de leche y cubiertos por glasé. Una versión miniatura de la torta rogel.
Córdoba se enorgullece de sus históricos alfajores de masa liviana y esponjosa rellenos de dulces de frutas locales y recubiertos con glasé de azúcar impalpable.
Mendoza, en cambio, hizo propios los alfajores hechos con harina de nuez, fruto seco que combina increíblemente con el dulce de leche que los rellena.
Por su lado, en el norte –Tucumán, Salta y Jujuy– se suelen encontrar los claritos: alfajores compuestos con dos tapas finas y crocantes de masa y rellenos de un merengue hecho con claras y miel de caña.
