Nante de ocho años se perdió en el helado bosque de Michigan y sobrevivió durante dos días a través de la ingesta de nieve. Además, se refugió con hojas y ramas para aguantar las temperaturas extremas que alcanza el lugar. Un caso sorprendente de supervivencia.
Nante Niemi de ocho años por primera vez se unía al viaje anual de fin de semana que realizaba su familia. El destino era en un bosque de Michigan en Estados Unidos, exactamente en el Parque Estatal Porcupine Mountains Wilderness (o sea, como su nombre lo indica, ‘montañas con poca gente’), un parque forestal demás de 240 km2.
Todo marchaba con normalidad hasta que Nante decidió ir a buscar leña para alimentar el fuego con uno de sus tres tíos y su abuelo, debido que se encontraba en un terreno donde abunda la nieve. El problema surgió cuando terminó de juntar las leñas y decidió volver al campamento, el niño no sabía en dónde se encontraba.
“Mi tío dijo que volviera al campamento y no podía decir: “no sé dónde queda todo el camino de vuelta al campamento”, él se dio la vuelta y se fue. Entonces traté de ir en diagonal a la parte de donde veníamos y terminé en un río. Ni siquiera estaba cerca de la parte en la que subimos por primera vez”, realtó Nante a la ABC News.
En ese momento, los cuatro familiares decidieron buscar a Nante y era un terreno difícil de transitar. La búsqueda fue en vano, no lo encontraron por ni un lado. Por lo tanto, uno de sus tíos decidió llamar a sus padres y a las autoridades para avisarles sobre lo que había ocurrido.
“Se tomaron un tiempo para buscarlo y no pudieron encontrarlos. Y decidieron que tenían que darse por vencidos y pedir ayuda”, expresó Jessica Buerger quien es madre de Nante.
Las autoridades rápidamente tomaron acción sobre el hecho que ocurrió el sábado 6 de mayo. Según el teniente Jason Wickstrom quien dirigió la búsqueda y es miembro de la policía estatal de Michigan, casi 300 personas salieron a buscar en esa área a Nante. El despliegue fue enorme e inclusive gente que no pertenecía a la policía quería ayudar en la búsqueda del menor.
“Es un terreno es muy montañoso y pueden surgir accidentes. En esta época del año (primavera helada), con el derretimiento de la nieve y la lluvia que hemos tenido, había mucha agua estancada y los ríos estaban muy altos”, comentó Wickstrom.
Por otra parte, Jessica agradeció a las personas por la iniciativa de querer buscar a su hijo, pero pidió por favor que no se acercaran porque así sería mucho más difícil encontrarlo.
“Estaba preocupado por el frío y porque estaba solo en la oscuridad, seguramente llorando. Nosotros esperábamos que no estuviera caminando por la noche y estuviera acurrucado”, declaró la madre.
Finalmente, después de dos días de intensa búsqueda por el terreno difícil, Nante fue encontrado el lunes por la tarde a tres kilómetros de su campamento. Según la policía, el niño se encontraba debajo de un tronco, lugar donde se refugió, después de haber estado caminado por un sendero.
Durante este tiempo, Nante dijo que solo trató de pensar positivamente y evitar dejar que el miedo se apoderara de él. “Recé para que me encontraran y no me quedaran aquí por el resto de mi vida”, recordó Nante con mucha angustia por lo sucedido.
Nante también explicó que cuando tuvo hambre, recurrió a lo que estaba disponible. “Decidí comer nieve para hidratarme. Solo lo pensé porque normalmente lo hago en invierno”, expresó el niño.
El niño se había cubierto con ramas y hojas para soportar las bajas temperaturas, también cubrió el tronco debajo del cual estaba. “Había desafiado a las dificultades refugiándose bajo un tronco, donde finalmente fue encontrado”, expresó la Policía Estatal de Michigan en un comunicado.
Por otra parte, el niño contó que, en un momento dado, se dio cuenta de que un helicóptero sobrevolaba sobre él y trató de llamar la atención de la gente que había dentro de él. “Estaba agitando las manos en el aire y gritándoles para llamar su atención. Vi un casco saliendo del lado del helicóptero, pero no me vieron”, comentó el pequeño de Wisconsin.
Al momento del rescate, el niño explicó que escuchó a la gente que gritaba su nombre, entonces sin dudarlo se dirigió hacia ellos para ser salvado. “Escuché a la gente gritando mi nombre y vi una cosa verde colgando. Luego vi a alguien y corrí directamente hacia ellos”, informó Nante.
Afortunadamente el niño contaba con muy buena salud y buen estado emocional, algo que sorprendió a muchos. “Si no supieras que estuvo en el bosque durante dos días, no lo sabrías. Nante actuaba normal, él estaba caminando y hablando. Estaba haciendo preguntas variadas y además dijo que no tenía hambre. Estaba perfectamente bien, pero le dimos un Cliff Bar (barrita energética), una banana y un poco de agua”, comentó Eli Talsma un joven de 18 años que ayudó en el rescate.
Por otra parte, Michelle Robinson, portavoz de la Policía del Estado de Michigan, declaró que no sabía cómo el niño sobrevivió solo, pero dijo que Niemi tenía “buena salud y estaba reunido con su familia.”
Nante y su familia dijeron que están agradecidos por todas las personas que les ayudaron a buscarlo. Hicieron una barbacoa para los rescatistas el miércoles por la noche para darles las gracias.
A pesar de su experiencia, Nante dijo que su amor por el aire libre no ha cambiado. “Obviamente todavía voy a ir a acampar”, concluyó el chico.
Una buena hidratación para sobrevivir
Tanto los bebés como los niños están calificados como el grupo más vulnerable para sufrir una deshidratación. Las causas pueden ser muchas, pero es importante siempre tomar líquidos como agua en cualquier situación.
Los niños y los adultos que presentan deshidratación grave deben recibir tratamiento en una sala de urgencias. Las sales y los líquidos que se administran a través de una vena, se absorben rápidamente y aceleran la recuperación.
Cabe destacar que no se recomienda ingerir nieve, sólo en caso de una extrema necesidad se puede consumirla para hidratarse, pero lo ideal es que se derrita antes de tomarse. Para calentarla una opción es utilizar el propio cuerpo.
Comer nieve es peligroso porque puede provocar el efecto contrario a la hidratación: aumenta la temperatura corporal de golpe y ocasionar quemaduras en la boca, los labios, diarreas, vómitos y malestar gástrico. Además, se recomienda en lo posible siempre hervir el agua antes de su consumo si no se está seguro de que es potable debido que aloja bacterias peligrosas.
La deshidratación presenta síntomas fáciles de detectar. Entre ellos, los más comunes son:
- Aumento de la sed.
- Sequedad en la boca.
- Debilidad.
- Dolor de cabeza.
- Mareos, desmayos.
- Náuseas.
- Palpitaciones.
- Confusión o desorientación.
- Orina oscura.
Informe y edición: Sofía Cabrera
