Héctor Germán Caballero, un parrillero de 32 años de Clorinda, en Formosa. Junto a él llegaron a la final los representantes de Entre Ríos, San Juan, Buenos Aires, Chaco y Salta. La misionera Tatiana Titus no pudo lograr su objetivo de ser finalista
El lunes 19 de junio, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se convirtió en el corazón del mundo parrillero de 10 a 18. Sobre la Avenida 9 de Julio, entre Corrientes y Avenida de Mayo, se llevó a cabo el Campeonato Federal del Asado. Así, a lo largo de cinco cuadras, se reunieron asadores de las 24 jurisdicciones del país, en busca del mejor. Y el mejor fue Héctor Germán Caballero, un formoseño que desde los siete años ya ayudaba en la parrilla de sus padres.
“El orgullo que me provoca representar a Formosa en este prestigioso torneo no me entra en el pecho. Llego ansioso y con el corazón en la mano, para entregar lo mejor de mí”, le contó a Infobae. Y así lo demostró en sus platos iniciales: con una bondiola de cerdo (a punto), unos riñones a punto y un lomo de surubí (como plato regional elegido) y en los finales: con una tira de asado, chorizo y morcilla, y medialuna de vacío, todos sacados en su punto.
La obereña Tatiana “Taty” Titus no pudo llegar a ser una de las seis finalistas aunque lo intentó con su innovadora receta de chimichurri a base de yerba mate sobre un pacú.
Los participantes habían sido divididos en tres grupos de ocho participantes que cocinaron por separado en cada tanda desde las 11 hasta las 15. Así, durante el lapso de una hora, cada concursante debió asar tres cortes de carne: bondiola de cerdo, riñón y un plato regional con el corte elegido por cada provincia, además de verduras que pueden presentarse como guarnición o, incluso, como un cuarto plato.
Además debieron preparar una provoleta, un queso que se adapta especialmente a la parrilla y es una verdadera exquisitez