El pueblo y su feligresía recordaron al obispo salido de allí, de entre su gente. Había sido el Obispo por apenas unos pocos meses cuando un cruel accidente segó su vida. Hoy, ya tiene su lugar especial en el tramado urbano
El martes 24 de Octubre se conmemoró el día de San Rafael Arcángel, Santo Patrono de Campo Grande, por lo que, bajo el lema “Comunión – Participación – Misión”, la comunidad campograndense se hizo presente a las 9 de la mañana a participar de la inauguración y bendición de la Plazoleta y el busto en homenaje al Monseñor Víctor Arenhardt, presidida por el Obispo de la Diócesis de Oberá Damián Santiago Bitar, acompañado del Intendente Municipal Carlos Sebastián Sartori, del Cura Párroco Damián Schwoerer, autoridades municipales, docentes y alumnos.
La propia comunidad se hizo eco de las palabras del hijo pródigo del pueblo, el Monseñor Victor Arenhardt: “las manos están puestas en el arado y el reino de Dios solo admite mirar hacia adelante”.
El monumento al primer Obispo Campograndense posee la arquitectura simbólica de la plazoleta con zócalos, columnas y pérgolas, y refleja su abrazo fraterno a la comunidad, donde su presencia emerge desde el centro para lograr así un espacio que invita a la contemplación y reflexión.
Posteriormente se procedió a la Procesión con la imagen de San Rafael desde la Plazoleta “Victor Arenhardt” hasta la Iglesia, donde se celebró la Santa Misa.
La celebración fue realizada por el Obispo de la Diócesis de Oberá Damián Santiago Bitar, donde participaron una gran cantidad vecinos de la comunidad.
Continuando con los festejos al Santo Patrono, se realizó venta de asado y un gran almuerzo comunitario, seguido de un matiné bailable con Compás de Amor. Y para finalizar, se realizará el gran sorteo del Bono Colaboración con 64 premios.
Breve semblanza
El Padre Víctor había nacido en Campo Grande el 23 de diciembre de 1948, en el seno de una familia de descendientes de inmigrantes alemanes y fue ordenado sacerdote el 5 de marzo de 1977, por el primer obispo de Posadas, monseñor Jorge Kemerer, el otro obispo de Misiones que está sepultado en la provincia.
Fue sacerdote en diversas comunidades de la provincia (Oberá, Posadas, Montecarlo) hasta que en agosto de 2009 el Vaticano lo ungió como el primer obispo nacido en Misiones.
La gente de la Zona Centro lo recuerda con mucho cariño y aprecio. Es así que Víctor Arenhardt es objeto de permanente veneración por parte de los feligreses que entran a la catedral cuando está abierta y también antes o después de cada misa, y rezan frente al lugar donde se encuentran sus restos. Armando Vera, otro sacerdote oriundo de Campo Grande dijo: “el fallecimiento de monseñor Víctor fue sorpresivo por la forma en que se dio y por el momento en que se produjo, ya que la Diócesis estaba en plena etapa de organización. Fue un golpe muy duro que lo sentimos mucho en su momento y lo seguimos sintiendo aún, pero la vida de la iglesia continúa y seguimos caminando”, expresó