El funcionario del Estado presentó su renuncia luego de 33 años al frente de su despacho. Ingresó en 1991 y fue protagonista junto con el Gobernador Julio César Humada de un famoso caso por querer expulsar al Fiscal de Estado y del otro lado tenía de opuesto a Luis Moreno Ocampo
Han pasado 33 años desde que Miguel Ángel Piñero asumiera como Procurador General de la provincia durante el gobierno de Julio César Humada. Tenía 46 años y como abogado se disponía a defender al Estado provincial: Debía como representante del Poder Judicial denunciar casos que hubieren perjudicado al Estado y plantear su defensa. También abogaría ante las demandas que los ciudadanos o personas jurídicas presentaren contra los organismos estatales. A eso se dedicó. Fue el jefe de los fiscales de la provincia. Pero también se hizo famoso por el caso Caamaño.
Pero por otro lado, existe el cargo de Fiscal del Estado que depende del Poder Ejecutivo. El Fiscal de Estado es el encargado de defender el patrimonio del fisco. Es parte en los juicios contencioso-administrativos y en todos aquellos en que se controviertan los intereses de la Provincia, entre otras funciones.
Piñero llegó y tuvo un encargo duro del gobernador Humada. Había que exonerar al Fiscal de Estado Álvaro Caamaño. No se conocen los motivos del encono. Pero Caamaño no iba más y Piñero se abocó a esmerilar el poder de Caamaño para expulsarlo del Estado. El jurado de enjuiciamiento era el mecanismo.
Pero resultó que el Fiscal de Estado no estaba dispuesto a irse así nomás. Contrató -nada menos- que a Luis Moreno Ocampo, el fiscal del Juicio a las Juntas Militares que unos pocos años antes había acusado a los militares (y lograr la condena) por su aberrante participación en la violación de Derechos Humanos en la última dictadura de la Argentina en el siglo XX.
Moreno Ocampo se instaló en Posadas y comenzó su silenciosa tarea. Al tiempo, una tapa del diario El Territorio exhibía cómo el Procurador (integrante del Poder Judicial) visitaba la casa de Julio Humada (máximo miembro del Poder Ejecutivo) y junto a otros políticos tramaban la expulsión del Fiscal de Estado. La secuencia de fotos era elocuente e impactante. Tanto, que el jury o juicio para expulsar a Caamaño, al poco tiempo, cayó y Moreno Ocampo y su defendido obtuvieron un gran triunfo.
Caamaño no pudo ser expulsado de la Fiscalía y al día siguiente nomás de su liberación de cargos, presentó la renuncia. Como diciendo: “No me echan; me voy porque quiero”.
Dicen que Piñero siguió visitando a Julio Humada hasta el fin de sus días.
Piñero volvería a las andadas luego en otro caso de juicio político a un Fiscal de Estado, y fue con Lloyd Jorge Wickström.
Ahora es su turno de partida: Piñero presentó la renuncia al gobernador Hugo Passalacqua el 2 de mayo, que fue aceptada de manera inmediata por medio de un decreto. Venía de varios meses de licencia por problemas de salud. En los últimos tiempos, su rol lo venía ocupando el fiscal de la cámara en lo Civil y Comercial, Flavio Marino Morchio.
Una de sus últimas participaciones públicas conocidas fue cuando en 2021 llevara adelante la acusación contra el juez de Familia de Puerto Iguazú Pedro Fragueiro. Pesaban sobre éste tres acusaciones formales junto con cinco denuncia penales: en todos los casos se lo sindicaba de acoso y abuso sexual. Piñero llevó adelante la acusación y en ese caso, Fragueiro no tuvo escapatoria: antes se tomó todas las licencias posibles y luego había presentado su renuncia al gobernador Oscar Herrera Ahuad. Pero éste se la rechazó. Siguió el juicio y todo terminó con la destitución del magistrado que acosaba y abusaba de mujeres y “deshonraba su investidura”, como sostuviera la ministra de la Corte, Rosanna Pía Venchiarutti
Ahora, ya hay nombres en danza y se especula que no se pondrá en marcha el Consejo de la Magistratura para proponer candidatos. Será el propio Gobernador que elevará a la Cámara de Representantes su propuesta de candidatos y de allí saldrá el remplazante de Piñero. Se habla de que el ministro de Gobierno Marcelo Pérez (ya había sonado para el Superior Tribunal de Justicia el año pasado) es uno. También citan a Víctor Hugo Marinoni, actual secretario administrativo y de superintendencia del STJ y al presidente de la Comisión Provincial contra la Tortura, Eduardo Scherer.
