El trasfondo es sencillo aunque no lo parezca: En Francia siguen ardidos por haber perdido la final de la copa mundial 2022 y a partir de allí, están pendientes de toda y cada una de las cosas que hagan o digan sus vencedores de entonces.
El detalle es elocuente: una vicepresidente de la Nación se involucra en una disputa que se origina entre jugadores de selecciones de dos países y que se derrama sobre una sociedad. El mediocampista argentino Enzo Fernández (integrante de la selección nacional) aparece en un video mientras canta un tema donde hace una “gastada” (una burla) a los franceses y -básicamente- al origen de los jugadores de esa selección nacional. El dato es muy elocuente: en 1978 cuando Francia participó del mundial jugado en Argentina su combinado nacional estaba compuesto básicamente por jugadores blancos, encabezados por el genial Michel Platini. En la actualidad, es a la inversa. Ya al campeonar en Rusia, Francia tenía más jugadores negros que blancos. Estaban el arquero Lloris, los defensores Pavard y Hernandez, el mediocampista Rabiot y los delanteros Griezman y Giroud. El resto, negros de origen africano. En el mundial 2022, la ecuación había cambiado y solo quedaban Hernández, Rabiot y Griezman. Ocho eran de origen africano.
¿Qué dice la canción polémica?
“Escuchen, corran la bola / Juegan en Francia pero son todos de Angola / Qué lindo es, van a correr / Son come trabas (forma vulgar y despectiva de llamar a los trans) como el put… de Mbappé / Su vieja es nigeriana; su viejo, camerunés / Pero en el documento, nacionalidad francés”, expresa la letra completa, que hinchas argentinos inventaron.
El tema apareció cantado por un grupo de hinchas en TyC Sports en un vivo.
Y desde ahí se popularizó. No es la más feliz de las letras pero tampoco debería tomarse más que como una forma de gastada. Poner el foco en la misma hace que se vuelva atractiva y más gente quiera conocerla. Efecto rebote y peores resultados. Lo no buscado es lo que aparece.
Uno de los que aparecía en el video polémico tras ganar la nueva edición de la Copa América es Enzo Fernández. Y como juega en un equipo inglés (Chelsea) lleno de jugadores franceses (varios de la selección) el escándalo estalló. ¿Por qué? Porque esos franceses lo denunciaron públicamente: como se dice en Misiones, unos pichados bárbaros que no se bancaron una letra picarona que ha habido miles desde la época de Quevedo. Si alguien no sabe qué es “ser pichado” se recomienda esta nota.
Enzo Fernández -seguramente asesorado- salió rápidamente a pedir disculpas en otro video.
Lo que no impidió que su patrón (el club que lo contrató) abriera un expediente disciplinario. Y no es todo.
La FIFA ya trabaja. ¿Alguien recuerda a la FIFA abriendo un expediente cuando los alemanes se burlaron de “los gauchos” argentinos o cuando los franceses se burlaron de Messi en 2018?
Sí. Hay más, señores.
la FIFA ya al tanto de la situación que se transformó en una denuncia pública por racismo a Enzo Fernández y anunció que tomará cartas en el asunto. Contactado por la Federación Francesa de Fútbol, la FIFA inició una investigación sobre el caso y evaluará, luego de la misma, si decide sancionar o no al futbolista argentino en el plano internacional.
Se denomina woke a la tendencia actual de realizar y apoyar todo lo políticamente correcto a favor del feminismo y en contra el racismo
Se denomina woke a esa tendencia actual de pensamiento correcto (“se utiliza para describir una amplia gama de ideas y movimientos relacionados con la justicia social como el antirracismo, el feminismo, los derechos de los transexuales”). Y también aparece la gente que integra la “generación de cristal”. No se les puede decir nada. Todo les afecta. En vez de templanza tienen lágrimas.
Memoria activa
Hay un dato interesante adicional: la FIFA analizará esta cuestión. Alguno pensará que está bien. Que eso no es folklore y que las cargadas burlas o chanzas (aunque sean en el fútbol) no están bien.
Solo un poco de memoria.
En 2014, Alemania humilló a Brasil en su propio suelo y le propinó 7 goles. Y luego en la final del mundo ganó 1 a 0 a Argentina. A los pocos días, ya en suelo germano, los jugadores bailaban para el pueblo (embebidos en hectolitros de cerveza) una danza que decía “Así caminan los gauchos, los gauchos caminan así…. (se agachaban y avanzaban todos abrazados como si fueran un grupo de simios) y “así caminan los alemanes, los alemanes caminan así” (y se erguían y caminaban derechos y firmes). Folklore.
¿Alguno pensó que eso era discriminatorio? Pues, no. La FIFA ¿hizo algo? Pues, no. La UEFA, nada. Se perdió y en la derrota había que bancarse.
En el frío sur, calentitos los panchos
En Argentina, la cuestión tuvo sus bemoles. Un funcionario de segunda línea (subsecretario de Deportes) salió a decir que no sólo Enzo, sino la AFA y hasta el mismísimo Lionel Messi debían salir a pedir perdón. ¡Para qué!
Más allá de la anécdota de que el funcionario en cuestión (Julio Garro) actuó así por sugerencia de su jefe político (Daniel Scioli) y que éste le había tendido una trampa, todo terminó con la eyección de Garro de su cargo.
Pero la que decidió que la cosa no terminaba ahí fue Victoria Villarruel.
Minutos antes de que la cuenta oficial de la Presidencia anunciara que despedían a Julio Garro, subsecretario de Deportes de la Nación, por opinar que Lionel Messi debería pedir disculpas para subsanar la polémica, la vicepresidente Victoria Villarruel publicó un mensaje donde daba un respaldo rotundo a Enzo Fernández, en una forma de oponerse al planteo woke francés.
Villarruel dio un enfático mensaje de apoyo a Enzo Fernández y puso el acento en la historia argentina
“Argentina es un país soberano y libre. Nunca tuvimos colonias ni ciudadanos de segunda (es fácil sobrentender que Francia sí tuvo ciudadanos de segunda)”, afirmó Villarruel en su cuenta de Twitter. “Nunca le impusimos a nadie nuestra forma de vida. Pero tampoco vamos a tolerar que lo hagan con nosotros. Argentina se hizo con el sudor y el coraje de los indios, los europeos, los criollos y los negros como Remedios del Valle, el Sargento Cabral y Bernardo de Monteagudo”, continuó y en su publicación adjuntó una imagen con los retratos de los tres revolucionarios.
“Ningún país colonialista (Francia lo es) nos va a amedrentar por una canción de cancha ni por decir las verdades que no se quieren admitir. Basta de simular indignación, hipócritas. Enzo yo te banco, Messi ¡gracias por todo! ¡Argentinos siempre con la frente alta! ¡Viva la Argentinidad!”, concluyó la vicepresidente.
Javier Milei no se manifestó por cuenta propia —sin contar el despido de Julio Garro—, pero compartió el tuit de una de las cuentas militantes de las que suele hacer eco. “¿Pedir que Messi pida disculpas ante los agravios de la progresía Europea? ¿Y encima querer culpar al presidente por esos nefastos dichos de Garro? Es una falta de respeto total, Milei jamás diría algo así del mejor jugador de la historia mundial”, dijo el usuario @TommyShelby_30, con el aval del presidente.
En pocos días, Milei estará en Francia (¿irá?) para el inicio de los Juegos Olímpicos y prevé reunirse con el mandatario galo Emmanuel Macrón. En otras épocas, cualquiera recordará, era cuestión de algunas cargadas.
El jueves 18 Karina Milei fue a la embajada francesa como secretaria de la Presidencia a pedir disculpas por las expresiones de Villarruel
El jueves 18, en forma casi subrepticia la hermana del Presidente y secretaria Karina Milei se dirigió a la embajada francesa en Buenos Aires. Las versiones fueron coincidentes: fue a pedir disculpas ante las expresiones de la vicepresidente Victoria Villarruel. La idea es, a grosso modo, evitar que la situación escale y pueda complicar de algún modo la visita del jefe de Estado a la capital francesa, donde está previsto que se dé cita la inauguración de los Juegos Olímpicos.
De hecho, en los 90, Carlos Menem solía reírse y animarse a hacer cargadas. “Eh, amigo Fernando Henrique cómo nos ganaron, eh?” hubiera dicho y todo seguía igual (o mejor).
Hoy todo se ha vuelto tan sensible que la generación de cristal está sensible.
“¡Son unos pichados!”, dirá algún misionero. Y quizá tenga razón.
