No hay tregua para el bolsillo de los habitantes de a pie: electricidad, colegios, combustibles, alquileres, salud, trabajo doméstico, cable, internet, telefonía, educación
Si bien el 4% mensual pareció un logro, luego de más de tres meses casi no se ha podido perforar el piso de ese porcentaje y la inflación (aunque relativamente baja) no deja de estar molestando a los argentinos. El ajuste fiscal encarado por el Estado a partir de no pagar, cortar, transferir, y del Tesoro a partir de no imprimir (sin respaldo) ha dado algunos resultados. De una inflación que pintaba para desbocada a fines del año pasado, se ha pasado a una todavía muy alta: un 4 por ciento mensual que si se proyecta constante llega al 60 por ciento en un año. Es un nivel altísimo. Y naturalmente, las demás variables acompañan esta realidad: los jugadores privados del mercado trasladan los aumentos que reciben al precio de sus productos y servicios. Y así, nunca se puede salir de esta espiral.
Se gobierna para la macro y para Buenos Aires donde las planillas Excel van indicando cómo marcha todo. No se está pensando en el ciudadano de a pie ni de sus necesidades.
Eliseo está contento
Uno de los aumentos fuertes que llegan por dos es el de los alquileres y las expensas. Los inquilinos que firmaron contratos bajo la Ley de Alquileres experimentarán un incremento significativo en sus pagos. Este aumento se calcula utilizando el Índice de Contratos de Locación (ICL), que combina la inflación y los salarios, recordaba una nota de iProfesional. Y con ello -además- llega el incremento en las expensas para el caso de los edificios en altura: será entre un 15% y 20%, y esto variará según las reparaciones o mantenimientos que deban hacerse.
“Voy a irme”, comentaba en la Costanera de Posadas un inquilino de uno de los hermosos departamentos frente al gran paseo capitalino. “Aunque no pago alquiler, las expensas solamente se me van a ir a 300 mil pesos y es mucho dinero. Prefiero vender este departamento y comprarme una casa y no tener este nivel de gastos solo en expensas”.
Como en la serie El encargado, donde Guillermo Francella personifica a un Eliseo como encargado de un edificio en altura de un barrio acomodado de CABA, todos los Eliseos del país estarán contentos.
También combustibles
Desde el domingo 1 de septiembre, los precios de la nafta y el gasoil en los surtidores suben entre un 2% y un 3%, debido a un incremento en los impuestos y la devaluación del peso. El ajuste responde a un decreto del Gobierno que busca gestionar el impacto inflacionario. Los combustibles premium en Posadas ya están en el orden de los 1500 pesos. Aunque con cierto cinismo las autoridades pueden defenderse al sostener que es un valor internacional ya que en muchos países está a 1 dólar o 1,10 dólar (como en este caso) hay que consignar el dato que están (maliciosamente) soslayando: en esos países NO HAY PETRÓLEO. Argentina en cambio tiene petróleo y sin embargo no es como Estados Unidos, Bolivia, Angola o Kuwait: en esos lugares las naftas están por debajo de 50 centavos de dólar.
El Gobierno también ha anunciado un aumento del 4% en las tarifas de luz y gas, efectivo a partir de septiembre.
Salud (privada) y ayuda doméstica
Al menos cuatro grandes empresas de medicina prepaga han informado a sus afiliados sobre un aumento en las cuotas que oscilará entre el 4,5% y el 5,8%. Este será el tercer ajuste en los precios de los planes desde julio, cuando se levantó la restricción judicial que limitaba los aumentos a la inflación.
Las empleadas domésticas también tendrán subas en el pago por hora.
Los empleadores deberán abonar este aumento a partir de septiembre, lo que afectará las tarifas horarias y mensuales según la categoría del personal.Las nuevas tarifas son las siguientes:
- Supervisores con retiro: $3038 la hora, $379.070 al mes
- Supervisores sin retiro: $3327 la hora, $422.241 al mes
- Personal para tareas específicas con retiro: $2876 la hora, $352.177 al mes
- Personal para tareas generales sin retiro: $2176 la hora, $343.606 al mes
Educación y comunicación
Las empresas de cable y telefonía han comenzado a notificar a sus clientes sobre un nuevo ajuste tarifario que se implementará a partir de septiembre.
En colegios privados de CABA suben otra vez. Pero en Misiones, el último aumento fue en julio y se anunció que no habrá más hasta fin de año. El promedio de la cuota está en 24 mil pesos y se estira hasta los 54 mil pesos.
La gran pregunta del final es -quizá- una que debiera ir al comienzo: hasta cuándo podrá aguantar la gente del pueblo argentino esta situación.
