Cada vez más sencillo de entrar y más dificil de salir: las apuestas online (en línea) de internet están al alcance de todos, pero el universo se ha extendido hasta el mundo de las criaturas
Tiene seis años y medio. Domina el smart phone de su abuela (que se lo da y a veces no puede controlar lo que juega). Ella se baja las aplicaciones interactivas para niñas. Son juegos muchas veces educativos con criaturas primorosas a las que hay ir -por ejemplo- vistiendo: se les pone una blusa de un color o de otro; lo mismo con la falda o con los zapatos, un sombrero; pintar las uñas y así. Pero a veces, en medio de esos inocentes juegos, aparecen invitaciones a apostar. Ella no lo sabe (porque aún no puede leer lo que dicen los carteles pero están ahí: algunos son en inglés), pero es un click y ya estará adentro. Lo único que falta es que la abuela tenga una cuenta asociada -por ejemplo- a Mercado Pago y el sitio pescador empiece a disponer de fondos y la inocente niña vaya cayendo en las redes de una ludopatía no deseada.
Si se pega un salto temporal, en los adolescentes la cuestión viene más complicada. Un tercio de ellos ya está involucrado a fondo. Un relevamiento realizado en Posadas revela que uno de cada tres adolescentes escolarizados participa en las apuestas online. El estudio, realizado entre agosto y septiembre de 2024, también indica que dos de cada cinco de aquellos que juegan comenzaron entre los diez y catorce años. La mayoría (seis de cada diez) accedió a las apuestas a través de redes sociales, publicidad e influencers.
Desde el Congreso
Un niño que pasa una, tres, cinco o más horas frente a la consola, sin poder dejar de jugar, aunque se lo proponga, es un ejemplo de ludopatía, conducta que implica realizar una actividad con una intensidad que sobrepasa lo normal y sano, que atenta contra la propia salud y que se realiza con pérdida de control sobre el tiempo.
A fines de noviembre de 2024, el Congreso de la Nación empezó a dar pasos en el sentido de controlar esta peligrosa tendencia. Sectores de la oposición lograron avanzar en la Cámara de Diputados con la media sanción del proyecto para prevenir la ludopatía y regular el juego on line. La iniciativa impulsada por la Coalición Cívica logró 140 votos afirmativos -en general- gracias al apoyo mayoritario de Unión por la Patria, Democracia para Siempre, Encuentro Federal y el FIT. El PRO, la UCR y la LLA se abstuvieron porque consideraron que el texto incurre en un exceso de regulación.
El 80% de los jóvenes que apuestan lo hacen en sitios no autorizados. En esta línea, un informe realizado por similarweb.com, en la feria Sagse Latam en Buenos Aires, revela que la visita de los usuarios a sitios clandestinos de apuestas en Argentina se incrementó un 150% de 2022 a 2023.
Por lo pronto, las casas de apuestas no podrán patrocinar equipos deportivos, influencers o famosos. Los sitios y aplicaciones deberán implementar verificaciones biométricas para impedir el ingreso a menores de edad.
Si bien existía un amplio consenso en cuanto a la urgencia de atacar la problemática de la ludopatía infantil, el principal foco de conflicto fue la prohibición de la publicidad. El proyecto aprobado limita de forma estricta la publicidad, promoción y patrocinio de los juegos de azar, de pronósticos y apuestas deportivas y de apuestas en línea.
En Misiones, se hizo el relevamiento. La Encuesta sobre Juegos de Apuestas en Adolescentes (EJAA), impulsada por la Defensoría del Pueblo de Posadas en conjunto con el Instituto Provincial de Loterías y Casinos (IPLyC) y el Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (IPEC), “abarcó a más de 4300 jóvenes de entre 12 y 21 años, de 20 escuelas secundarias de la ciudad, tanto públicas como privadas”, explicó la directora de la defensoría del pueblo, Valeria Fiore Caceres. Según Fiore, se trata de una muestra más que representativa.
El problema está identificado. Y en la norma sancionada quedan comprendidas las plataformas y redes sociales a través de Internet, las tecnologías de la información y la comunicación, la comunicación audiovisual, la publicidad exterior, la indumentaria deportiva, la cartelería en la vía pública.
También se prohíbe el auspicio de equipos deportivos o deportistas en forma individual, utilizar su marca o denominación comercial para identificar a una instalación deportiva, estadios, academias deportivas, centros recreativos, espacios públicos, centros de entrenamiento, la promoción de pronósticos deportivos y la colocación de cartelería fija o digital en los campos de juego y estadios.
Y otro tanto será para su difusión en festivales o recitales artísticos o musicales y eventos culturales en general.
Y finalmente, incluye la publicidad indirecta o encubierta “a través de influencers, de programas infomerciales y/o la publicación onerosa o no, de testimonios de deportistas, personajes famosos, figuras de relevancia pública o personajes de ficción, que los mencione”.
La iniciativa aprobada en su artículo 2, prohíbe el acceso de criaturas y adolescentes menores de 18 años a sitios y plataformas de juegos de azar y apuestas, de pronósticos y apuestas deportivas en línea. En esa línea, también estipula que los operadores y licenciatarios de juegos de apuestas deberán tener en sus sitios o aplicaciones mecanismos de verificación biométrica de identidad y edad -conectados con la base de datos del Registro Nacional de las Personas (RENAPER)- para garantizar la mayoría de edad de los usuarios.
