Hace menos de dos semanas había ganado la plateada en Tokio. Se llama María Andrejczyk y es de Polonia. Pero se enteró de un niño de su país que necesitaba dinero para una operación y no dudó. Una tienda pagó unos 50 mil dólares y, además, le reintegró el premio. Ah, y ella misma había superado un cáncer en 2018