La ilustración de esta nota corresponde al caricaturista uruguayo Arotxa. Y evidencia claramente cómo alguien -cuando habla- puede incendiarse (o explotarse) a sí mismo. Hace 20, las famosas palabras "todos los argentinos del primero al último, son una manga de ladrones" fueron proferida por Jorge Batlle. El que las obtuvo vive en Misiones. Es Martín Boerr y da su propia versión de lo que pasó