"Quick. Run". Apenas dos palabras. "Rápido, corran". Era todo lo que había que decir. Lo que le había enseñado el maestro de Geografía era exactamente lo que estaba pasando. El mar se retiraba y el agua tiraba chispas como si fuera una fritura. Se venía la ola gigante. Y ella y sus padres avisaron. Se salvaron cien personas en esa ocasión